El apocalisis politico y mediático sobre Fukushima

Entre la prensa y los politicos no ganamos para sustos: los primeros nos narran las explosiones y los muertos de la catastrofe todo bien mezclado, a veces parece que la situación de emergencia de la central de Fukushima II ha provocado 4.000 muertos, y los segundo nos sitúan al borde del apocalisis nuclear.

Si quieren tranquilizar a la opinión publica con información veraz y contrastada, ¡lo estan logrando de largo!



Los niveles de radioactividad han alcanzado puntas de 400 milisieverts/hora en los alrededores de la central.

Esta radiación proviene principalmente de los gases liberados para rebajar la presión dentro de la vasija (la vasija del reactor es la segunda medida de contención) y bajan dramáticamente al alejarse unos metros de la central

Tabla aproximada de los efectos de la radiación (tomados de Wikipedia):
- 1 mSv: límite legal de exposición anual (0,11 microSv a la hora)
- 2,4 mSv: radiactividad natural al año (0,23 microSv a la hora)
- Hasta 0,2 Sv. Sin efectos aparentes.
- 0,2 a 1 Sv. Síntomas leves. Posible esterilidad masculina temporal.
- 1 a 2 Sv. Envenenamiento ligero. Mortandad (en 30 días tras la exposición): 10%
- 3 Sv. Envenamiento severo. Tasa de mortandad: 50%
- 4 a 6 Sv. Tasa de mortandad del 60%
- 10 Sv (1000 rems). Mortandad del 100%





A día de hoy, la integridad de los edificios de contención (estructuras de hormigón con paredes de 2 metros de ancho) no ha sido rota, a diferencia de Chernobyl, ya que esta medida de seguridad no exisistia (debió ser que el gestor publico de la central decidió ahorrar coste, algo muy capitalista). Chernobyl ha sido el u ido único accidente nuclear de categoría 7. Lo que hemos visto destruidos explotar son los edificios de los reactores, cuya única finalidad es proteger al edificio de contención de las inclemencias meteorológica y, por tanto, construidos de metal y no de hormigón.

El siguiente gráfico del diario El Pais refleja la situación a día de hoy de los 4 reactores de Fukushima I.






Según pasen las horas todo ira volviendo a la normalidad, espero que todos los alarmistas antinucleares reflexiones unos minutos sobre la gran seguridad de las centrales nucleares y de cómo han actuado en esta crisis.


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